Schafik
Hándal,
comandante Simón (13·10·1930-24·01·2006)
Los
mitos de la militancia
Osmín
Juárez
13·10·2017
Los
elegidos de los dioses
seguimos
estando a la izquierda del corazón.
Debidamente
condenados como herejes
Y
me llamarán
el escrutador.
El
más apto para ser odiado
Roque
Dalton
Todos
renacimos en 1992
Intro
Schafik
Hándal
fue
uno
de los
militantes
comunistas
proscritos
que con
los insurrectos espíritus
originarios de
1932, vagaban
por las veredas de Cuscatlán
y Mesoamérica.
En
esas largas y azarosas andadas,
”jugando mica y escondelero”,
burlando ”orejas y cuilios”,
se crearon
los mitos y leyendas de
los guerrilleros revolucionarios
del Siglo 20. NO
se veían, pero se sabía que asustaban,
peleaban y
difundían pensamiento libertario por
los senderos Sandinistas, allá en
las aldeas
y selvas Mayas, en
los barrios
y cerros Cuscatlecos,
… Un
embrujo Nawat
cobijaba
en las
sombras
de la
clandestinidad a esos
subversivos y a Schafik,
que era
un nombre
raro en
esa Tierra
de cosas
preciosas,
un fantasma
que le quitaba el sueño y
le daba dolores
de cabeza a
los oligarcas;
que
hacía hablar
y a la
prensa escribir. Irónicamente,
para la gran mayoría de sus
paisanos mortales, era un
hombre desconocido. Y en
ese devenir,
medio se conocen los
yerros y aciertos de Schafik y
sus demonios antes y durante la
guerra, en ese
país Pulgarcito
que se llamaba y se llamará
Cuscatlán.
Nacido
en Cuscatlán, pero venido
de ultramar, Schafik era visto
como un instigador
de los pobres y ”escrutador” de los ricos. Por ende, los
escritos oficiales lo
acusaban de ser un
“demonio
comunista”, y marioneta
del maligno
bloque soviético.
Tal propaganda hizo
de los comunistas, ”los más
aptos para ser odiados”. Que
también son malqueridos por
sus
compañeros anti-comunistas,
que los
acusan de
cualquier cosa y los
descalifican —
siendo ellos
NO calificados.
Escritos
y habladas de izquierdistas
y derechistas hay
con sal
y sin cilantro.
En contraste lanzo
mis memorias
intentando
develar algunas
realidades detrás
de los mitos de
los
militantes que
pelearon y cayeron, de los desaparecidos,
fusilados
y descuartizados
que resucitaron y ”renacieron”,
y que por ”ay” andan y a
pesar de sus mitos NO
asustan con sus miserias. Sus
luchas en la postguerra están
artículadas al
accionar de Schafik,
la Persona Política que vimos y conocimos junto
a militantes de su entorno y
Organización. Estas
letras no son
un trabajo biográfico, sólo
son vagas
reflexiones de un militante que
pelea contra el olvido e intenta
rescatar un trozo de historia rememorando vivencias
con otros militantes.
Podemos
de Ellos poseernos, beber
y silbar
su aporte a la
historia, y
para re-conocernos
y por sus frutos conocerlos, otra
vía es leerlos. Entre otros,
Schafik escribió
unas
memorias
de esas luchas socioculturales
y políticas.
Animal
político
La
política
y lo
político
fueron el vicio,
el hobby
y el deporte de Schafik. Hay
suficiente evidencia empírica
que demuestra
la resistencia y habilidades en esas
“artes
marciales“,
que superan la pinche
humanidad y sugieren una
animalidad: un ”caballo
político” fogueado en largas carreras
y peleas desde la adolescencia.
Para NO perderme
en esos míticos y sinuosos
senderos los remito a los
testimonio y análisis sociales y
políticos de Schafik,
que escribe desde su propia
participación en esos eventos y luchas (ver
Hándal 2014).
Me
límito
a decir que Schafik
fue uno de los tejedores en las cruciales
experiencias de
los 70s: Una
marathon electorera donde se
cultiva una cultura de consensos
logrando
articular los Movimientos
sociopolíticos
de
demócratas
cristianos, socialdemócratas
y comunistas en 1972. Desafían
a la oligarquía y sus
militares en la
pelea electoral
por la guayaba,
avanzan
y generan gran movilización, pero
se impone el fraude y la represión.
Con ”la
terquedad del Izote”
se
lanzan a un segundo ”match”
en 1977. Logran articular a una
parte de los militares en la elección presidencial, generan
mayor movilización, pero
afrontan
lo más
burdo del fraude y lo más
brutal de la represión, que
logra imponer y
mantener el poder de la oligarquía
militarista.
Sin más opciones e inmersos
en un auge de Movilización Popular, Schafik
y los comunistas se ven obligados
a subordinar la lucha electoral
por
la lucha armada guerrillera.
La
era guerrillera supera en alguna medida la era electorera, que se va
pero regresará. Lo militar fue lo visible y el principal marketing
de guerrilleros y gobiernos militaristas, pero lo político lo
complementa, allá en las tinieblas como suele ser. Detrás del
accionar militar hubo un dialogo y negociación política de las
cúpulas en conflicto, cubierto en lo mítico de la clandestinidad
que protegía y obedecía a los intereses de los que no eran amigos
ni enemigos — esos que hoy vemos
asociados haciendo jugosos negocios. Schafik estuvo en esos
”chanchuyos”, y como político se fue destacando en la guerra de
los 80s hasta ser uno los principales negociadores de la Guerrilla.
Además, es autor de una parte importante de los Acuerdos de Paz, y
uno de los principales actores, corredores y peleadores en esa ultra
marathon política y militar.
El
comandante
Yesenia,
Simón, Joseline,
Wilito, Narciso
Isa Conde y
Veronica
en
Guazapa Sur 1992
Simón,
igual a
la mayoría de ”comandantes”, tuvo
la suerte de ”dirigir” y
representar a un ejército
chiquito pero eficaz,
formado por intrépidos
y audaces
guerrilleros.
Pero Simón
y “sus
cuatro
gatos comunistas”,
eran considerados militarmente
insignificantes, y por sus
malas mañas
fueron
difamados, malqueridos
y menospreciados antes,
durante y
después de la guerra de
los 80s. Sus
“locos”
compas anti-comunistas, alucinando
ser los más
audaces
los odiaban
y descalificaban por
“chiquitos y piorcitos”.
Otros que
creían ser los
más grandes,
los
menospreciaban y
ofendían llamándolos
”chipuste”. Pero la
historia muestra que toda la Cofradía Guerrillera falló en su
intento de Insurrección Popular el 22 enero de 1981, y hubo que
demostrar el arte
en una larga “guerra
de baja intensidad”.
En ese contexto, el
”pato feo”
de la Cofradía,
logró
resistir y burlar el poderío
militar de los
batallones élite y las
fuerzas especiales con
toda
su estrategia y armamento made
in usa
por más de una década, creando
un ícono guerrillero
y un
mito
en el
Cerro
Guazapa. Ese puñado de gatos
comunistas
rondando descalzos ese cerrito
chiquito, lo hicieron famoso world
wide, y
su mito cautivó
el arte de Hollywood,
que inmortalizó
a Guazapa en
películas, y muchos otros hicieron
lo propio quedando plasmado en
muchos tipos de documentales.
Los gatos salvajes
de Simón
convirtieron Guazapa en
un símbolo
del
accionar guerrillero con
tenebrosas y luminosas leyendas de la guerra real
en Mesoamérica –
contra todos los pronósticos
y teorías. Irónicamente, sus
compas
“agrandados” intentaron
echarlos de ese
cerrito, al
inicio de la guerra, pero cuando
sintieron lo fiero y la frecuencia de los combates,
se ”guindearon”
al norte,
donde habían mejores condiciones para “guindearse” y pelear. En
contraste, los
gatos de
Guazapa Sur
se acostumbraron a
pelear en esas épicas condiciones,
que allí
se
hizo lo normal.
Resistieron
casi a diario intensos
bombardeos y
combates en
los que ejerciendo apasionadamente
el verso de la calidad contra la cantidad, burlaron
y vencieron
a
los batallones élite en
esa
década y unos
años más, peleando
casi sólo
en solo menor,
en ese pedacito
de Tierra que es
uno
de los más bombardeados en el
mundo.
El
mundo se sorprendió
de la capacidad de ese puñado de gatos guerrilleros (para
más dolor de sus detractores),
pues de
la nada aparecieron en la mítica
Metro, humillaron
al
presidente que beso la bandera
gringa (1984-1989), y
desaparecieron robándole a
su hija el décimo día del noveno
mes de 1985 (ver Araujo 2010).
A Ella la
enamoraron
y amaron
bajo el cielo y las
estrellas de la “Dama
Durmiente”; y
reaparecieron robándose
el show
en los noticieros de la
televisión, a
todo “gato color” se hicieron míticos y famosos world
wide.
Luego potenciaron
la guerrilla urbana
matando
los mitos de la Metro, adictos
al mito de la
calidad operaban en solos y/o dúos
de
mujeres/hombres
que descalzos o motorizados ponían
en jaque a los batallones élite made
in usa (ver
Juárez 2018). De la nada se
alzaron en una espiral operativa utilizando las más descabelladas
y/o creativas tácticas
guerrilleras, que fusionando artesanía y tecnología reventaron
el estado mayor, la guardia
nacional, la policía de hacienda
y otros
cuarteles del ejercito –
salvándose la fuerza aérea
gracias al endemoniado riesgo,
miedo
y las ganas de vivir. También
tocaron
las
redes de informantes más
intocables del enano,
quienes
lloraron y pidieron cacao por
sus móviles
amarillos. Y
lo inaudito: llevaron
la guerra a las colonias de los
ricos (tabú
para los ”locos” y
”agrandados”
que acusaron,
amenazaron y refunfuñaron,
pero …
secretos).
Por esas
malas mañas,
pecadores e irreverentes
eran y son
los más odiados al seno de la Cofradía Guerrillera, donde las
diferencias ideológicas, políticas y
tácticas que generaban
conflictos,
derivaron los
pretendidos hegemonismos en
autonomismos, y
nadie se subordinó. Cada
quien libraba su propia guerra como y donde
quería, sí
podía. El
arte de la guerra, la coordinación
de sus tiempos,
espacios y otros, develó
ser un azaroso sendero de
ensayos y errores frente a los
ojos del pueblo en la ofensiva de 1989. Ella reveló
quién
era quién
en la mítica
Metro, y
los Gatos
Salvajes
de Guazapa Sur mostraron
músculo y pelearon á
lo ”chingón”,
aguantando
toda
esa
épica batalla
y un puchito
más. Sus locos y agrandados
detractores
se vieron obligados a
articularse a Ellos en ese mítico
fighting,
que acerco el final de la guerra
(ver Gutiérrez
1993, Ayala 1997, Merino
2011).
Arañando
el final de la guerra los
Gatos
de Guazapa Sur dieron una gran
sorpresa. Descabellada e
impensable, pues el
cansancio era mayor, y el
olor al cese del fuego decía que
nadie se quería
morir de dolor
de
amor.
Pero por puro amor y amor a la
aventura á la enésima potencia,
en una
fecha mítica del sexto mes de
1991,
sorprendieron
al mundo con
una de las últimas operaciones guerrilleras de gran envergadura en
plena capital Cuscatleca. Y
para variar se
robaron
el ”show”.
¡Otra
vez! De
la nada aparecieron
con el
son del crepúsculo, derrochando
agilidad y audacia en
una espectacular y fulminante
operación militar que venció la
defensa de la cárcel y
liberó
a guerrilleros
presos
en
”miami”,
y desaparecieron bailando
la noche con
la sinuosa
serpiente del Acelwate, para
reaparecer
en la luminosa Guazapa, dando conferencia de prensa a pleno medio
día (ver
Ayala 1997). Con
esos pocos ejemplos
de sobra conocidos y los no
conocidos, Simón
tenía suficiente
para ufanarse y peinarse
con una
aureola
de ”comandante y estratega
militar” —
pero afirmó
que más
bien, Él era
un ”cuadro político”. Y
la política lo esperaba con las
piernas abiertas.
La
política finalizó la guerra en la Aurora de 1992. Los guerrilleros
ganaron la Victoria de NO haber sido vencidos por un ejército mayor
en hombres y armas, y haber burlado la cultura militar de la primera
potencia mundial. Firmaron un acuerdo de paz que legitimó su
existencia y la de otros demonios en la política de la nación.
Entraban a otra era electorera y veríamos a famosos fantasmas y
legendarios guerreros a plena luz del día. Perdían lo mítico en
una situación de postguerra complicada, y debían ser audaces en la
praxis diaria con los pocos axiomas que quedaban y guiaban a la
mayoría, pues ”la política sería la continuación de la
guerra por otros medios”, solo para una minoría.
Cerro
Guazapa visto desde Aguilares: La Dama Durmiente
Peleador
de postguerra
Todos
renacimos en 1992. Negociada la guerra, el mito de la paz reunió el
22 de enero a vivos, medio vivos, muertos y medio muertos, con los
vivos y muertos de 1932, 1833, 1524. La plaza y catedral de san
matador fueron el santuario del ritual y real reencuentro mítico:
Por fin veías sin miedo las leyendas y los desaparecidos
reaparecidos, que sin disfraces ni camuflajes, salieron de las
quebradas y bajaron de los montes. Irradiaban un embrujo con buenas
auras y nuevos tiempos. Los guerrilleros a pesar de sus épicas
hazañas, NO tenían ningún parecido a los súper héroes de los
”comics” — eran de lo
más común y corriente. Con el crepúsculo llegó la ”comandancia”,
y las multitudes vieron de lejitos esos famosos fantasmas. Simón
llegó, habló y salió encarrerado flanqueado por el Mulus. Lo vimos
peleando política ese año efímero. En el discurso de clausura de
los acuerdos de paz, dio un ”agradecimiento a Cuba Socialista por
la solidaridad brindada durante la guerra”; y unos ilusos lo
abuchearon. Pero como NO era chiche pa chicopalarse, erguido
activó su Persona Fuerte y con ahínco y más energía, les dedicó
y repitió ese satánico verso. Callaron. Otros aplaudieron. Fue uno
del preámbulo de los pleitos públicos y publicitados que libró y
ganó; pero veríamos sus peleas de postguerra a todo ”gato color”
en los 90s y más allá.
De
peleas electoreras y pleitos políticos
La
nueva era electorera inicia en 1994. Coinciden elecciones
presidenciales, legislativas y municipales. Los guerrilleros
le ponen un puchito de ”axiote” a esa sopa, sólo
más color — el mismo olor y
sabor. Schafik tenía detractores que lo odiaban á lo jarocho
en todos los Movimientos articulados en la Cofradía Guerrillera,
pero esas envidias e ineptitudes no pudieron superar sus dotes de
líder, capacidad analítica y visión política. Por más que lo
descalificaban y difamaban, no podían contener su accionar
sociopolítico, y se lanzó para alcalde de la capital san matador
en 1994. Salió taleguiado. Igual que la mayoría de
guerrilleros. Eran desconocidos para la mayoría del pueblo y tenían
que demostrar buenos dotes y malas mañas para ganar simpatía
popular. Por suerte ganaron algunas alcaldías y diputados en la
asamblea legislativa. De nada les valieron los mitos y leyendas en
esa lid, y tras la derrota quedaron mutilados el mítico I de mayo,
día que inició labores la nueva asamblea. Fueron sorprendidos por
sus “audaces” compañeros anti-comunistas que los traicionaron
pactando y durmiendo con el ”enemigo”. De su
locura a la esperanza de hacer buenos
negocios con sus nuevos socios políticos, fracasaron
en su ilusoria ”renovación”, y sufriendo esquizofrenias murieron
políticamente al final de la legislatura en las elecciones de 1997.
Pobrecitos. El fracaso lo corono el remate de los comunistas,
ortodoxos y guerrilleros que in crescendo ganaron más
alcaldías y diputados.
Schafik
fue electo diputado y jefe de fracción en la asamblea en 1997. Con
eso amplió el espectro y espacio de su Persona Política, cuya
influencia creció generando cruentos y crueles debates en temas
centrales y sensibles de la vida nacional. Su accionar político in
crescendo lo llevo a ser uno de los principales analistas de las
problemáticas del país. Su opinión contaba y participaba en
entrevistas y debates con intelectuales y políticos en los
principales canales de televisión. Su mayor pecado fue acusar sin
medias tintas, en vivo y en directo a algunos de los miembros de las
cúpulas derechistas, que se creen dueños de Cuscatlán. Sin miedo
denunció los errores y problemas que sus gobiernos habían generado,
con el propósito de favorecer económicamente a sus amigos y grupos
corporativos. El calor de los debates revelaba los verdaderos pleitos
políticos, y alguna vez creímos que Schafik y su contraparte
pasaron de las palabras a los puñetazos. Eso NO lo vimos, pues se
suspendió la transmisión para calmar los ánimos y retomar el
programa con cordura. Tal confrontación, vista a todo ”gato color”
en todo el territorio, reconfirmó y revivió el mito de que Schafik
seguía siendo ”el escrutador de los ricos”, y por ende ”el más
apto para ser odiado”. Su energica irreverencia golpeaba fuerte a
las cúpulas escuadroneras, era visto como un gato salvaje que NO
podían domesticar. En contra, lanzaron otra gran campaña de
difamación y desprestigio, más cara que en las décadas anteriores,
centrada en la Persona de Schafik como blanco principal, y los
comunistas como blanco electoral. Era un poco más de lo mismo de los
viejos tiempos, pero eran tiempos de ”paz”, y a pesar de su
poderío NO lo ”querían tocar”, por temor a que ”los tocaran”
los gatos salvajes y demonios comunistas.
Re-demonizando
demonios y otros diablos
La
matanza de los diablos que machete en mano se lanzaron a la
insurrección el 22 de enero de 1932, creo el mito de que esos
”indios” irreverentes habían sido exterminados. En su ausencia,
habían demonizado a los pocos comunistas que sobrevivieron, y
continuaron con los que salieron de la guerra en 1992, y sobretodo
con los que seguían subvirtiendo el status quo y su política
en tiempos de paz. Las cúpulas escuadroneras, al NO ganar la guerra
habían perdido poder, y tenían miedo de seguir perdiéndolo vía
elecciones. Por eso re-lanzaron una gran campaña de miedo, y
tergiversando realidades pretendían aterrorizar a la población
abusando de sus medios de desinformación. Creyeron crear el mito:
”Schafik el malvado” con un caldo condimentado á maximus
con injurias y difamaciones. Fue fácil, pues ya se sabía que era un
demonio comunista, Él lo confeso y NO renegaba de su afiliación
política, aunque evitaba nombrarla para NO morder los anzuelos, ni
caer en las trampas del acoso periodístico. Lo añejaron con la
imagen de viejo bravo, intransigente, malcriado, comeniños,
secuestrador, subversivo, etc.
La telecorporación dirigía el show, y se le unía un coro de
periodistas, analistas, intelectualoides, renovadores e izquierdistas
arrepentidos, etc. Más
pronto que rápido convirtieron la Persona de Schafik en un ”capo
del mal”, con bandas de salvajes comunistas que eran capaces de las
peores cosas – hasta de tomar el cielo por asalto. Esta florida
propaganda potenció la cultura anti-comunista e inundó el mundo de
las comunicaciones. Fue una campaña multimillonaria, que desde
inicios de los 90s se extendió hasta la primera década del nuevo
milenio, siendo permanente, amoral y perversa en momentos
electoreros. Peleando y politiqueando se fueron develando los mitos
que le impugnaban a Schafik y los comunistas, los mitos de los
“comunistas” y otros diablos y especies que se veían pero medio
conocíamos.
Conociendo
millonarios pobres y oligarcas
desheredados
Las
odas para, y sacrificios por el pueblo, eran rituales
centrales de comunistas guerrilleros y diablos similares. Pero las
realidades develaron que el tal pueblo NO era tan conocido – era
más bien un mito del imaginareum revolucionario.
Irónicamente, había que explorar y conocer sobre lo que tanto se
había hablado, soñado, amado ...
Vagando
en el amado pueblo, el Bicho U y Sawamura el Campeón sufrieron una
revelación. Jugando con los “comunistas” que los demonizaban por
ser Ellos y pensar con cabeza propia, se fueron de
campaña con un compa guerrillero que peleaba una alcaldía allá, en
las faldas de un volcán bonito camino a oriente. Tenían la mala
maña de operar a la incandescente hora del diablo: las 12 meridiano,
que siempre pide el sagrado almuerzo y descanso. Buscando tortillas
por esos montes, medio extraviados vieron que de un ranchito chiquito
y desconchabado salio un viejito chiquito y pechito, con unas
hilachas de camisa desabotonada mostraba una lujosa osamenta producto
del hambre histórica, descalzo y con un pantalón de un difunto
hermoso que se sostenía con un pedazo de pita, medio asustado
preguntó: ¿Y ustedes quiandan
haciendo mucha? Andamos visitando y platicando con la gente sobre las
elecciones de alcaldes y diputados. ¿Ya
se decidió por quien va votar? ”Ah, esque dicen quesi gana ese
Shafi y los comunistas, nos van quitar las casas, las vacas, los
terrenos, ...”. ¿Y usted
cuantas casas tiene? Le pregunto Sawamura con tono condescendiente.
El viejito se quedo perplejo, calló y seguramente sintió que la
tierra se le movía y el diablo se lo tragaba. Sus ojos delataban que
su pobre cerebro se retorcía y desorbitado por aquella cruda y cruel
realidad, botó la quijada mostrando su amplia pobreza dental y
cabizbajo se ahogo en su silencio. El Bicho andaba un mapa y vio que
estaban en una propiedad de la familia del compa que iba para
alcalde. Y le dijo al viejito: ”No se aflija abuelo, el Tata deste
baboso comunista que va para alcalde es el dueño de estos terrenos,
y no lo han echado ni lo van echar. Por ay anda con nosotros y usted
lo debe conocer. Además, no conocen ni le hacen caso al tal Shafi”.
El viejito medio muerto en su desconcierto dio la vuelta, caminó y
desapareció.
Ese
día el Bicho y Sawamura conocieron pobres que NO sabían que eran
pobres, y unos pasos más allá, hubo otros que alegaban pertenecer a
linajes azules, y respondieron con prepotencia al ver sus miserias,
alegando que les habían robado las propiedades de su familia por
culpa de los comunistas. Al final de la jornada, con la caída del
crepúsculo y al son de unas chengas con chicharron y ron,
vino la reflexión, que ni el genio del pobre Schafik explico: Existe
una especie de pobres que viven en un mundo mítico creyendo ser
millonarios u oligarcas desheredados. Lo científicamente verificado
es que son de los más pobres de los pobres y la mayor parte del
pueblo. Pero NO se estudió e interpretó, y en el ”ajo”
electorero NO era fácil convencer a los pobres de que eran pobres y
que NO votaran por los ricos – se priorizó el marketing
político destinado a una minoría en detrimento del activismo
político de la mayoría. En ese momento, el ”ajo” electorero se
subordinó al ejercicio del poder de la cúpula gobernante, queriendo
imponer su capricho de eliminar a Schafik de la escena política. Un
peleador que perturbaba su accionar y asustaba su sueño; y que
gracias a ellos era una Persona Política cada día más conocida. Su
paranoia devino en pleitos e intrigas novelescas.
Un
novelón de película
Schafik
sufrió el más despiadado ataque del más burdo terrorismo
mediático. Sin mayores pruebas lo acusaron de ser el autor
intelectual de los principales secuestros cometidos en los 90s. Fue
el sospechoso central del famoso y fantasmagorico ”caso
secuestros”: Un gigante en el espacio cibernético de los medios de
desinformación, y un bicho microscópico en material penal (ver EDH
2001). Esos magos sacaron del sombrero un demonio para asustar
a uno de los Hombres Fuertes de la escena política de Cuscatlán.
Ante la embestida, Simón fue tenaz y sereno moreno bailó en ese
novelón. Lo acosaron implacablemente para sacarle ”el indio”, y
lo lograron: fue parco. Se limitó a decir: ”tienen techo de
vidrio”. Y con ese bendito verso añejado con un maldito silencio,
jaqueó a la cúpula secuestradora que lo acusaba. Luego les envió
un breve mensaje semisubliminal en público, pues tenía
información de los negocios que el capo más católico le
secuestraba a un su socio, y se le había complicado. En contra,
quiso mostrar músculo allá abajo, en las tinieblas de lo político,
intentando capturar a otro viejo comunista Compa de Simón, y
susodicho autor material de los secuestros. Nunca se vio y lo que
reveló la desinformación periodística en ese novelón, fue el
fiasco policial.
La
policía se topó en las sombras de la clandestinidad con el
Viejomalo. NO fue la primera vez que fallaron, y por eso activaron la
fuerza del ”organismo”, y unos ”locos” que presumiendo su
”audaz inteligencia” y anti-comunismo, se los engancharon
para ”cazar comunistas”. La cacería del Viejomalo es una leyenda
sin fin. Dicen que dicen que solo lo ven los ojos ciegos en su
oscuridad. Los cuilios que lo siguen terminan muertos de
miedo, o quedan lisiados de por vida sufriendo esquizofrenias, pues
los sorprende y asusta convirtiéndose en Jaguar, Cadejo y otros
animales y vegetales. Los locos fracasaron
de a millón en la cacería, salieron asustados con la cola entre las
patas, les quitaron el empleo y se perdieron en su demencia.
Pobrecitos. Se creyeron la leyenda de que eran los más ”audaces”
y se vieron torpes e incapaces frente a un viejo de sus odiados
comunistas legendarios. Más allá de las leyendas, lo real es que en
una de esas fugas fugaces, allá por ”bandidos del boulevard”, en
un pachanguero de luces negras con rones y rumbas inmortales,
el Viejomalo se topó con Sawamura el Campeón, que andaba acompañado
de una voluptuosa deidad germánica que cegaba con sus destellos
esmeraldas y doradas crines. El Viejo, amo y señor de los siniestros
suburbios de la mítica Metro, andaba despabilando la anemia, se
lanzó y cuestionó: ”¡Puta!
¡No se te quitan las malas
mañas!”. ”¡Tuve buenos
ejemplos! ¿Y que diría Simón si
te viera por estos lares?”, respondió Sawamura, que aun
descolochado, encachuchado y con gafas de intelectual, lo reconoció
y vio sus ojos devotos de la belleza y el pecado, por lo que lo
remató: ”¡No te aflijas, van
unos cuantos a tu salud!”. El Viejo soltó una potente carcajada, y
como jefe que es, le echo la mano al hombro y lo sentó. Conspiraron
por unos infinitos instantes al son de unas pils, y ya con la
sed aliviada se fugó. Dicen que dicen que en la salida lo esperaba
El Puma y con fugaz agilidad se lanzaron por la barranca que está al
otro lado de la calle y desaparecieron en las oscuras mágicas aguas
azulañil de una poza iluminada por un ojo del plenilunio. Allá
abajo, en Xibalbá los esperaba la Divina Xivet, y al son de unos
tarros de xixa y otros de xocolatl, analizaron
la situación y planificaron su accionar. Luego se recrearon en las
divinas concavidades y renacieron en las exuberantes convexidades de
la morena Xivet. Aurora los apapachó y les iluminó
los laberintos por los que seguirían jugando ”mica y escondelero”,
burlando ”locos y cuilios” en las junglas urbanas del Valle de
las Hamacas y otras veredas en el verdeazul de Cuscatlán.
En
ese mítico devenir, lo científicamente verificado es que esos
diablos subversivos andan en su salsa y pachanga peleadora
como en los viejos tiempos. NO se ven, pero se sabe que por ”ay”
andan jodiendo y riéndose de los sustos que le deparan a sus
perseguidores. Y siguieron en las andadas allá abajo, mientras allá
arriba, Simón en su salsa y pachanga política iba a otra
pelea por la mera guayaba en el umbral del milenio. Un sopón
que sumaba al calor, sabor y olor de ese novelón que algún día
será película.
Desmitificando
el demonio presidencialista
El
mito del excelentísimo señor presidente pululó con
una aureola celestial destinado a la cúpula de los militares por
casi seis décadas del Siglo 20 – hasta que los guerrilleros los
jaquearon. Por eso lo retomaron los oligarcas, ya avanzada la guerra
en 1989. Pero una década después, esas clases sufrían disensos y
desarticulaciones, que añejadas con el pleito con comunistas y
guerrilleros, perturbó y destiñó la cultura presidencialista,
cediendo que el mítico puesto del ”excelentísimo” se lo
pelearan dos pobres que no querían ser pobres. Habían sido electos
en las peleas novelescas de las cúpulas ”derechistas e
izquierdistas”. En estas últimas, Schafik y los comunistas
perdieron, y el candidato a presidente de los ex-guerrilleros en la
elección de 1999, fue un ”agrandado renovado” que ya había sido
amansado por la cúpula gobernante. Esos agrandados creían en la
renovación a puro marketing y apenas lograron unos cuantos
votos más. Perdieron un pleito pusilánime y aburrido contra un
pinche peón de segunda generación. Pobrecitos. Fallaron con
su hegemonismo en la guerra y con su reformismo en la postguerra,
pero se creían la leyenda de que eran los más grandes —
y no llegaron ni a enanos de circo. Salieron con la cola entre las
patas taleguiados por un cipote sin rango, linaje ni apellidos
exclusivos que encarnó un señor presidente de bajo tipo —
pero creía ser filósofo. En su mito, de peón de patrón pasó a
peón del emperador. Vetó y mató códigos, mintió y robó. Pero
sin la investidura y pobre de intelecto le vaciaron la leyenda. Fue
acusado y se fugó. Pero pobre de intelecto y animalidad, no aguantó
el trote y lo pescaron (ver LPG 2015). Pobrecito. En la cárcel
lloró, sin remedio ”se enfermó”, y sin gloria por encargo ”se
murió”. Tiene reservación en miami.
Irónicamente,
ese presidente pusilánime (1999-2004), confirmó el arraigo y la
simpatía que las cúpulas escuadroneras y emergentes tienen entre
los más pobres del pueblo: ”la majada nacionalista”. En sí, son
las bases leales, el voto duro y el activismo radicalizado de la
militancia de derecha — poco
permeables al marketing izquierdista. Derrotaron en grande a
los agrandados renovados en 1999; y del trauma se peliaron,
acusaron y abandonaron a los comunistas y guerrilleros. Confirmaron
el fracaso de su leyenda renovadora perdiendo en grande las
elecciones de 2000 y 2003. Pobrecitos. Fracasaron y murieron más
rápido que los locos, mientras sus menospreciados comunista y
guerrilleros se convirtieron en la primera fuerza de la asamblea
legislativa, y gobernaron al menos en 80 alcaldías a lo largo y
ancho del país (ver TSE 2003). Con esa fuerza, Schafik fue electo
candidato a la presidencia en 2004, y se lanzó en campaña. Salía
de pachanga política los viernes a las plazas ampliando su
contacto con los pobres pueblos, y recorrió Cuscatlán matando
mentiras, y sin miedo seguía escrutando a los ricos gobernantes.
Estos se asustaron cuando vieron que su mítica creatura crecía como
un monstruo que los podía dañar. Lo decían sus mediciones, pues
como candidato a presidente presentaba cifras similares a las de su
rival, y NO había garantía de victoria en 2004. Cargaban la
vergüenza de haberse tragado que
un hijo de colono fuera el excelentísimo señor presidente —
y NO podían permitir que un comunista lo fuera. Este punto de honor
los obligo a potenciar la campaña anti-Schafik, y actualizar la
cultura del fraude.
El
fraude montado por las cúpulas escuadroneras y emergentes fue
novedoso y los ilusos comunistas y guerrilleros se durmieron y les
metieron gol. Calcularon que los votos de la ”majada nacionalista”
no eran suficientes, y burlaron el sistema informático que regía la
elección. Lograron que una parte de sus nacionalistas votara doble,
e incluyeron a miles de centroamericanos en el padrón electoral.
Esto se confirmó en las elecciones del 2006, y se demostró y frenó
en 2009 (con eso se logró una mínima diferencia sobre la majada
nacionalista y los “comunistas” aliados con un bichito y los tres
cochinitos ganaron la presidencia, tendencia que a duras apenas
alcanzó para ganar en 2014), pero hay un componente cibernético de
“hackeo” poco conocido y revelado. El fraude técnico se
complementó con la campaña del miedo, que saturo todos los medios
de comunicación con audios y videos anti-Schafik; y con la compra de
votos y voluntades que incluyó al grupo de agrandados renovados que
se quedaron con los comunistas y guerrilleros. Habían sido
derrotados por Schafik, y con ganas le hicieron contra-campaña. Fue
la campaña anti-comunista más grande hasta hoy vista. Violó todas
las leyes y reglamentos. En plena elección la corporación difundió
audios y videos anti-Schafik. Quien ante esa descomunal maquinaria de
difamación y terrorismo mediático, perdió la elección. Ello
confirmo á la futbol, que a fuerza de amaños cualquier
pusilánime puede ser campeón o presidente.
El
presidente (2004-2009) fue un pollo que por sus voces se creía un
gallo que había timado a las cúpulas escuadroneras y emergentes,
que seguirían gobernando solo a medias, y con un excelentísimo
que no pertenecía a las clases sociales tradicionalmente
poderosas. Es parte de los inmigrantes mercaderes y comerciantes del
Medio Oriente que formaron el estrato social, conocido como ”la
turcada”. Enorme la ironía, pues la ”majada nacionalista” como
buenos católicos “no vieron” que la presidencia se la peleaban
dos descendientes de árabes musulmanes nacidos en Usulután que no
hablaban buen árabe, y que si ganaba Schafik, la primera dama de la
nación sería una Rusa Preciosa, prodigiosa creatura cultural y
escultural de la Unión Soviética. Lo científicamente verificado es
que el cipote turco se creyó el mito de que era un luciente
presidente, y con ganas y de a galán mató códigos, mintió y robó.
Pero pasado su mandato, ya sin la investidura, le desinflaron la
leyenda y vino la vendetta. En esa lid, se confirmó que es pobre de
intelecto y animalidad: ¡lo
sorprendieron y le aguaron la fiesta! Pobrecito. Humillado, hoy es un
pinche pollito que pía y chilla en la cárcel (ver El Mundo 2018).
Schafik
no fue a la cárcel. Perdió la presidencia pero ganó el caso burdo
y amañado en que era acusado. Fue absuelto y venció al principal
difamador presta-nombre que fue condenado y multado. Al Viejomalo lo
condenaron pero nunca lo capturaron, confirmó su don de Nawualli y
con la animalidad del Jaguar sigue vagando sonriente, burlando
cuilios, locos y otros ilusos por los sinuosos senderos de Cuscatlán
y Mesoamérica. Al final se impuso la Persona y la Personalidad de
Schafik el comunista, que logró duplicar el caudal de votos
en 2004 estableciendo una nueva base y tendencia electoral firme para
la susodicha izquierda; y de paso venció a todos sus
detractores que lo veían imposible y vaticinaban la debacle del
Movimiento. Ello confirmó, contra la visión del mismo Schafik, que
en la complementación la Persona determina y potencia a la
Organización — NO
siempre es a la inversa. Schafik
demostró que era un caballo
político y siguió
con su trote mostrando que los comunistas guerrilleros
revolucionarios son tan comunes y corrientes como la gran mayoría, y
que a pura voluntad y gracias a la magia del maíz pueden
enriquecerse e incrementar su fortuna de animalidad. Lo
personificaba, pues por enésima vez había burlado y seguía
peleando con las cúpulas escuadroneras y emergentes con sus locos
serviles y agrandados renovados. Por cierto, un grupo de estos
últimos aprendieron algo de la lección: se quedaron y se arrimaron
a los comunistas, y andan cargados y encaramados. Pobrecitos. Sin
Schafik y sus odiados comunistas serían
solo muertos olvidados —
NO serían parte de los mitos.
De
mitos, miedos, masoquismos y
maldiciones
La
Antropología explica que las Culturas tienen sus mitos
fundacionales, y las Personas sus mitos existenciales. Los mitos son
tan reales e indispensables en el quehacer cotidiano, que es
necesario producirlos para guiar el accionar de multitudes, ejercer y
conservar poder, y vivir existiendo siendo parte de algo y/o siendo
alguien. Irónicamente, vemos que las realidades más crudas y
crueles han creado los mitos más poderosos de los pobres; y han
desmontado los más amados de Schafik y los comunistas: Los pobres
sobreviven sus miserias apapachando el mito de que son
millonarios oligarcas de pura sangre —
mientras los comunistas sobreviven desconcertados esas realidades, y
la miseria de la filosofía cuyas
teorías científicas
sobre la sociedad y la lucha de clases devinieron en mitos.
Los
mitos del miedo y la cultura del terror sistematizada por las élites
imperiales a nivel global, han sido útiles para sostener el status
quo de occidente. Cultivados en el terreno fértil del pueblo,
han opacado a la Sociología y su teoría de la lucha de clases que
enfrenta a pobres y ricos. Lo demuestran los pobres más pobres, que
expresan y ejercen un gran respeto y votan por la política de los
ricos, contra sus propios intereses. Eso explica en parte porque el
pueblo no se levanto y fallaron los intentos de ”insurrección
popular” en 1981 y 1989. Hoy sabemos que las clases más bajas y
pobres son anti-comunistas y contra-revolucionarios; en contraste,
los comunistas revolucionarios crecen y se forman en las clases
medias, unos pocos en las clases altas como Schafik, y poquitos en
las clases bajas.
Las
clases más bajas son la mayor parte de la ”majada nacionalista”,
la militancia de derecha fundamentalista. Creíamos que sufrían en
su extrema pobreza, pero como campeones del masoquismo muestran que
la gozan y hasta premian a quienes los han tenido secuestrados en la
pobreza desde tiempos de la colonia. La Psicología amplía la
explicación de ese ”amorío enfermizo” en el “Síndrome de
Estocolmo: las victimas desarrollan sentimientos afectivos,
se enamoran de sus captores y cooperan con ellos”
(ver Bejerot 1973). En este caso observamos que van más allá en la
dimensión sensorial, pues esa ”majada” ha cultivado con firmeza
en su universo subjetivo que son parte de las élites mercantilistas
y financieras. Lo real y científicamente verificado es que los
dueños del país, ni en sueños los dejan entrar a sus mansiones —
pero esa majada se siente parte de ellos y febrilmente cooperan y los
defienden con amor. Ese sentido subjetivo lo disuelven en un accionar
político radical y sin miedo, muy fieros odian y combaten a los
comunistas. Es más, contra los demonios como Schafik, ejercen su
catolicismo exacerbado e invocan sus máximos poderes extraterrenales
para lanzarles las peores maldiciones.
Las
maldiciones complementan
las explicaciones
científicas
que
describen el
fenómeno
psicosocial que sufren los pobres
en la
lucha
cultural
que observamos. La
reflexión, el canto
y llanto de la Poesía amplían
la compresión e interpretación.
Amparo llora
cantando una
maldición del colonialismo, al
confirmar una conducta de los
pobres que desconcierta:
”tu, hipócrita que te
muestras, humilde ante el extranjero, pero te vuelves soberbio, con
tus hermanos del pueblo”.
Roque complementa
elevándose
a la enésima potencia ante esa
maldita servidumbre de los pobres
y
subyugados,
con un bendito verso que afirma
un maldito aforismo:
”guanacos
hijos de la gran puta, mis compatriotas, mis hermanos”.
Esos
versos brindan
sustancia para la comprensión
y son
tan lucidos
y reales como
los mitos y las
teorías
—
aunque
fallen en
contrapunto a la poderosa
Animalidad
de
los Indomables
Guanacos
y la magna Santidad
de la Bendita
Malintzin
y
todas las Divinas
Mujeres
de Maíz.
Coloso
comunista y continental
Schafik
Hándal, Hugo Chávez,
Fidel Castro y Evo Morales, La
Habana 2005
Por
más maldiciones, masoquismos, miedos y mitos creados y lanzados
contra Schafik — NO lo pudieron
detener, ni mucho menos dominar. Gracias a ellos confirmó el
ejercicio de poder de la Persona Autónoma bendecida por el embrujo
indígena en la elección presidencial de 2004 con el voto de 812 519
Cuscatlecos (ver TSE 2004). Schafik a esas alturas de la historia era
un caballón político que seguía su marathon con ritmo y
paso firme. Había recorrido Cuscatlán burlando las trampas de sus
detractores, y se convirtió en el comunista más votado de
Mesoamérica en el nuevo milenio —
algo inaudito. No era presidente, pero era miembro del club de
presidentes más influyentes del Continente. Ese status devino
al demostrar que era un tenaz Luchador Cultural que había derrotado
a izquierdistas y derechistas; erigiéndose en un coloso comunista
respetado y admirado en el Continente. Con ello descuartizó el
estigma y la cultura anti-comunista; y golpeó fuerte a los
inquisidores y difamadores, cuyos mitos, miedos, maldiciones y
fatídicos pronósticos se convirtieron en basura virtual olvidada.
Pobrecitos. Tan católicos como son, hoy viven con miedo rezándole a
todas las vírgenes y sólo a las vírgenes, para que el demoníaco
fantasma de Schafik no los asuste.
Schafik
no se asusto con las crudas y crueles realidades que lo acosaban. Vio
que los más pobres del pueblo habían desarmado a comunistas
guerrilleros y revolucionarios de sus teorías, mitos y visiones. En
ese caos comprendió que había que pensar con cabeza propia
más allá de las teorías occidentales y la susodicha lucha de
clases. Y una vez más tuvo suerte mirando al Sur, donde el épico
renacimiento de los Pueblos Originarios descuartizó el mito de su
exterminio, y los mitos, miedos, masoquismos y maldiciones del
catolicismo. Ese embrujo indígena potencio los mitos de la
militancia etno-política de los Aymaras, Quechuas, Guaraníes, ...
descolonizándolos de las teorías occidentales a través del
ejercicio de los principios milenarios de la Cosmovisión Originaria
(ver Juárez 2006). Y de su legendaria resistencia desplegaron la
Lucha de Culturas creando Poder Popular y regenerando
Alternativas Autóctonas y Autónomas de gobierno en los Andes,
proyectando un sendero luminoso para la descolonización del
Continente.
El
Sur del Continente floreció en revoluciones y se convirtió en el
Norte de los guerrilleros revolucionarios. Schafik lo visitó con su
comandante, convirtieron los Mitos Originarios en sus nuevas teorías
científicas y se armaron de un nuevo discurso sociopolítico y
cultural. Es más, la solidaridad y la diplomacia popular fluyeron y
crearon poder, gracias a los petrodolares de las Revoluciones
Culturales. Pero Schafik partió y no vio que sus compas se
convirtieron en una corporación que anda enredada en la perversión
del mercado neoliberal. Su cúpula empleó a una minoría de sus
cheros de chupa, familiares, amigos y amantes —
y demonizó y marginó a la mayoría de su militancia: comunistas,
guerrilleros, revolucionarios, veteranos y lisiados de guerra. De
nada les valieron los mitos, hazañas y miserias compartidas en la
guerra. Irónicamente, algunos de los empresarios de la cúpula que
gobierna, evocan e invocan esas leyendas y se creen comunistas.
De
comunistas y ”comunistas”
Los
”comunistas” NO son comunistas, porque NO ejercen el sagrado
principio de la igualdad. Igual a todas las organizaciones
políticas que se denominan ”democráticas”, pero NO son
democráticas. ”No son lo mismo, pero son
iguales”. Los ”comunistas” más desiguales
son la minoría de empresarios millonarios. Los menos iguales son los
guerrilleros lisiados y militantes históricos que hacen magia para
vencer miserias día tras día. La mayoría NO son NADA iguales, y
han sido excomulgados y expulsados de la secta de los dioses
”debidamente condenados como herejes”, por el pecado de criticar
y ”pensar con cabeza propia”. De esos, hay millonarios de
miserias y otros que algo son y viven de ser Ellos, y por eso
son los más odiados. Dicen que dicen que los ”comunistas” que
hoy gobiernan solo con la foto de Schafik, menosprecian a los
compitas y se ríen a carcajadas de los locos y agrandados que los
menospreciaban. Pero sus más consentidos son los agrandados
renovados que se quedaron y se vanaglorian ignorando sus ineptitudes
— los han cargado y se les han
encaramado. Pobrecitos. A fuerza de chantajes, chambres, berrinches y
amaños les tienen que premiar sus ineptitudes y los hacen
funcionarios o diputados. El colmo es que fracasan como diputados y
los hacen alcaldes, fracasan como alcaldes y los hacen ministros,
fracasó como vice- y ministro y lo hicieron presidente de más y
mayores fracasos.
Así
es la política. En lo político, por suerte hay uno que otro
luchador cultural o comunista que trabaja contra y/o atrás del trono
y allá abajo en las sombras, y por eso son acosados por las cúpulas
criollas, las élites imperiales y la mediocridad de ”agrandados
dirigentes”. Por suerte, a pesar de las presiones, enfermedades, la
edad y las lesiones de la guerra, NO se achicopalan y
endemoniados siguen en las andadas aguando fiestas y disfrutando el
”fighting” como Miguel y Schafik.
Simpatía
por el Diablo
Schafik
era consciente de ser visto como un diablo que había ganado
simpatías, pues cuando se es alguien, y sobretodo un Campeón,
siempre habrán los que te desprecian y odian y los que te aprecian y
aman. Tal simpatía se había extendido incluso al seno de algunos
estratos pobres, pues es casi imposible en esta era estar
(des)informado, al son de los Rolling Stones, si quiere, y
saber que ”todos los pecadores son santos”, y que los
peores pecadores reciben los más prestigiosos y santificados premios
mundiales. Tales hechos han matado muchos mitos occidentales y han
jaqueado el moralismo catolicista que ha creado y alimentado los
demonios más perversos. Pero llegando el turno del ofendido,
Schafik, adicto a los chistes, con el embrujo de una diabólica
sonrisa burlona bendijo la leyenda que le acusaban con un maldito
verso: ”Todos los del eje del mal tenemos muy buen humor”
(El Faro 2005). Y con ese buen humor siguió en sus andadas y
pachanga política allá por el Sur.
En
el Sur Andino, el 22 de enero 2006, Schafik representó a Cuscatlán
en la Sagrada Tierra de Tiwanaku, donde tomaba posesión Evo Morales,
el primer Presidente Originario del Continente. En su discurso,
Schafik saludó la Revolución Cultural del los Pueblos Originarios
de Bolivia (ver Juárez 2006), y rememoró los épicos combates de
los Pueblos Originarios el 22 de enero de 1932 en Izalco, Nahuizalco,
Juayúa, ... y la instauración de Poderes Populares Autóctonos y
Autonómos en el occidente de Cuscatlán. Vio el renacimiento de
Aquino, Ama, Miguel y muchos otros Luchadores Culturales —
renacían por enésima vez. Ya habían sido inmortalizados por la
Poesía de Roque y Galeano, pero son muertos que guían a los vivos,
y estaban presentes. En ese ritual, Schafik lanzó benditas mágicas
aguas azulañil al exorcismo del endemoniado catolicismo, y á
maximus vivió y disfrutó una catarsis en esas preciosas y
prodigiosas alturas Andinas, y ya descolonizado, inspirado y poseído
de los reales mitos y leyendas Originarias, visionando
descolonización voló a Cuscatlán.
Schafik
llegó a Cuscatlán en cuerpo y espíritu astral, y en ese estado
libró y ganó un combate colosal. Sus detractores creyeron que sin
gloria, se iba por la puerta de atrás, pero como Campeón peleador
entró por la puerta principal, siendo recibido y aclamado por miles
de miles de Cuscatlecos que confirmaron su simpatía por el Diablo, y
ejerciendo poder al son de las élites
imperiales: por sus pecados lo santificaron.
Eso derivó de la magnitud e irreverencia del colosal homenaje a su
partida, que marco historia y queda como reto al futuro. Fue un
”match” en el que venció a propios y extraños. ¡A
todos! Nadie imaginó tal PODER movilizador (ver La Prensa 2006). Sus
detractores se asustaron y acobardados sufrieron infartos cardíacos
y todo tipo de ataques, achaques y malestares. Pobrecitos. Se vieron
muertos y solitos. Pues jamás habían visto ni sentido el impacto de
tan inmensas, masivas, multifaceticas y multitudinarias
movilizaciones que por varios días se sacrificaron para acompañar
el ritual de Schafik en su entrada a Xibalbá.
En
Xibalbá, Schafik se reunió con Aquino, Ama, Miguel, Roque, El Puma
y otros Luchadores Culturales; generaron consenso y destronaron
dioses, decidiendo que la Morena Xivet dirija la horizontalidad de su
accionar. Sin Ella NO son Hombres. Schafik sigue deleitándose con
los ”delicate sound of thunder”, y con los Compas
se la pasan jugando pelota con los Jaguares en la riviera del rio de
aguas mágicas azulañil, de cuya fuente cultivan, producen y beben
xixa y xocolatl en largas tertulias, donde discuten política y
poesía, y elaboran documentos visionando futuros, mientras los
murciélagos los deleitan con rituales y danzas al son de corridos,
rancheras, salsas, rumbas, sonatas rockeras, metaleras, … Viven
Bien En Xibalbá despreocupados de su
inmortalidad.
Epílogo
La
memoria de Schafik devela que los mitos de la militancia
revolucionaria en Cuscatlán tienen a su base las realidades más
crudas y crueles – en contraste
con los mitos de los más pobres del pueblo. Ellos han desvirtuado la
teoría de la Lucha de Clases ejerciendo su mito de ser
multimillonarios, odiando y combatiendo a los comunistas
revolucionarios. Estos reaccionaron y se armaron de los mitos de los
Pueblos Originarios, convirtiéndolos en su nueva teoría y discurso
político. Pero como buenos colonizados católicos no pecaron, y
fieles a la perversión del mercado neoliberal se corporizaron. Por
eso NO desplegaron la Lucha de Culturas que confronte los mitos
Cuscatlecos a los mitos occidentales –
so pena de excomunión. NO comprendieron ni ejercieron los
mitos, leyendas y visiones Originarias, que añejadas con poesía e
ironía, son parte esencial y central de la subversión cultural y
las luchas del siglo 21. Fallaron en su difusión virtual, que es
punta de lanza en esta era de la (des)información, para crear
Identidad, ejercer y sostener poder al seno de amplios
sectores de población. Engreídos e ilusos abrazaron el mito del
poder creyendo ser la nueva clase real, y despreciaron la
descolonización de Cuscatlán y Mesoamérica. Por eso fracasaron
gobernando y sin gloria mueren políticamente, pues mancharon la visión Originaria del Vivir Bien y
traicionaron a la militancia histórica y la memoria de Schafik, que es sólo un ejemplo que
afirma el PODER que tienen los mitos y los muertos para movilizar
multitudes.
Schafik Hándal, mural
en el barrio san miguelito
Referencias
1.
Cuscatlán: del Nawat, Tierra de cosas preciosas, república de El
Salvador en Mesoamérica, el Pulgarcito de América
2.
La terquedad del izote: Carlos Henríques Consalvi, ”Santiago”
1992
3.
La guerra es la continuación de la política por otros medios: Carl
Von Clausewitz 1832
4.
De la locura a la esperanza: Informe de la Comisión de la verdad,
ONU 1992
5.
Pensando con cabeza propia: frase acuñada por Schafik
6.
Miseria de la filosofía: Karl Marx 1847
7.
Síndrome de Estocolmo, Stockholmssyndromet: Nils Bejerot 1973
8.
La maldición de Malinche: Amparo Ochoa, del autor Gabino Palomares
9.
Poema de amor: Roque Dalton
10.
De la lucha de culturas en Bolivia: Osmín Juárez 2010
11.
Pequeña serenata diurna: Silvio Rodriguez
12.
Sympathy for the Devil: The Rolling Stones 1968
13.
El turno del ofendido. Roque Dalton 1962
14.
Miguel Mármol, los sucesos de 1932: Roque Dalton 1972
15.
El siglo del viento: Eduardo Galeano 1986
16.
Delicate
sound of thunder: Pink Floyd 1988
17.
1932:
La insurrección
de los Pueblos Originarios del occidente de Cuscatlán, el 22 de
enero de 1932, sostuvo Poderes Populares Autóctonos y Autónomos
durante tres días. Luego se impuso el genocidio del ejército
nacional con una matanza de unas 30 mil
personas.
18.
1833: La
insurrección de Anastacio Aquino en
Santiago Nonualco
derrotó
al ejército
del gobierno español en
varias ocasiones
en
enero-febrero de 1833. Avanzó
a San Vicente y Zacatecoluca, haciendo huir al gobierno de la
capital. Pero
Aquino y
los Nonualcos nunca
recibieron esa
noticia, y
debido a enfermedades y traición, perdió la batalla decisiva en
Santiago
Nonualco a finales de febrero. Aquino
escapó, pero fue
delatado
y capturado
en abril y luego decapitado en San Vicente.
Es un
símbolo de la resistencia Originaria en Cuscatlán.
19.
1524: Pedro
de Alvarado y
su tropa cruzan
el rio Paxaco
(Paz),
iniciando
la invasión española en junio de 1524. Son
parcialmente derrotados por los
Cuscatlecos en Acaxual y Tacuscalco. En las
batallas, Atonal
identifica a Alvarado
y
con su lanza lo derriba con todo y caballo. Alvarado, herido
y cojo, regresa sin gloria a Iximche
en
GuateMaya.
Del
vocabulario guerrillero y
popular
Acelwate/Acelhuate:
del Náwat, rio
de
abundantes ninfas/lilas. Rio contaminado
que
serpenteando
atraviesa el Valle de las Hamacas, la zona metropolitana del gran san
salvador, la capital de Cuscatlán
Achicopalarse:
amedrentarse
Ama:
Feliciano Ama, legendario luchador cultural y guerrillero Originario
en
1932
(VBEX)
Amparo:
Amparo Ochoa, cantautora mexicana
(VBEX)
Apapachar:
del Náwat, acariciar con el alma, abrazar
Aquino:
Anastacio Aquino, legendario luchador cultural y guerrillero
Originario (VBEX)
Axiote:
achiote,
del
Náwat
achiyotl,
fruta
medicinal y colorante.
Cuatro
gatos: expresión
despectiva que alude a un grupo
pequeño e insignificante
Cuilios:
policías
Chanchuyo:
negociación
y acuerdo
furtivo,
ilegal
e
inmoral
entre cúpulas políticas
Chengas:
tortillas
Chiche:
fácil
Chingón:
cachibóm, á lo campeón
Chipuste:
pedazo de caca
El
Bicho U: militante de la guerrilla histórica
El
organismo: el organismo de inteligencia del estado (oie)
El
Mulus: legendario guerrillero y militante comunista
El
Puma: legendario militante comunista y capitán guerrillero (VBEX)
El
Viejomalo: legendario militante comunista y comandante guerrillero
Engancharon:
engañaron
Estocolmo:
Stockholm, la capital de Suecia
Galeano:
Eduardo Galeano, poeta uruguayo (VBEX)
Gato
color: publicidad del canal 4 de televisión
Guayaba:
la presidencia de la república
Guerra
de baja intensidad: teoría militar del pentágono de usa
Guinda:
huida, retirada, repliegue
La
Cofradía
Guerrillera:
el frente Farabundo Martí para la liberación nacional (fmln), articulación de 5 movimientos: pcs, fpl, erp, rn & prtc
La
Metro:
la zona metropolitana del
gran
san salvador, la capital de Cuscatlán
Los
agrandados: las
fuerzas populares de liberación (fpl), los
que creían ser los más grandes y fracasaron
Los
comunistas: el partido comunista (pcs), los que creían ser los mejores y fracasaron
Los
locos: el
ejército revolucionario del pueblo (erp),
los
que creían ser
los más audaces y fracasaron
Majada:
grupo de amigos o montón
de majes/magos
Maje:
tonto, idiota,
imbécil, estúpido
Mica
y escondelero: juegos
infantiles de persecución y escondidas
Miami:
Mariona, centro penal la esperanza
Miguel:
Miguel
Mármol,
legendario militante comunista y
guerrillero
(VBEX)
Náwat/Nahuat:
Idioma Originario de Cuscatlán, uno de los más grandes en
Mesoamérica
Nahualli:
del
Náwat: Brujo,
Shaman
Oreja:
informante
de la policía y/o el
ejercito
nacional
Pachanga:
fiesta
Pils:
pilsner/pilsener, cerveza
Puchito:
poquito
PRTC/prtc: partido revolucionario de los trabajadores centroamericanos
Refunfuñaron:
protestaron
Roque:
Roque Dalton, poeta,
legendario
militante revolucionario
y
guerrillero (VBEX)
RN/rn: resistencia nacional
San
matador: san salvador, la
capital del homicidio
Sawamura
el Campeón: militante de la guerrilla histórica
Taleguiado:
golpeado, vencido
Xibalbá:
el
inframundo de los Mayas. El
vientre
de la MadreTierra, caverna ardiente y
regeneradora
donde los bandidos que
confrontan tiranos viven
bien ad
infinitum
Xixa:
chicha,
cerveza
de
maíz
Xivet: siwet/sihuet,
del Náwat: Mujer
preciosa
y prodigiosa
que
apapacha
y
protege
a
los bandidos que enfrentan tiranos. Bruja que asusta
y enloquece a los cobardes que maltratan sus
semejantes
Xocolatl:
chocolate, cerveza de
cacao
Lectura
complementaria
Ayala,
Edwin Ernesto (1997). El Tope y más allá. Testimonio de una
guerrilla. Desde la Ofensiva del 89 a los Acuerdos de Paz. Editorial
Sombrero Azul.
Gutiérrez,
Dagoberto (1993). La persona, la fe y la revolución.
Juárez,
Osmín (2006).
Sobre
la
democratización
de lucha
cultural
en los
movimientos Aymaras
en
Bolivia:
La
visión y construcción Aymara de la democracia multicultural.
Academia.edu:
https://www.academia.edu
Merino, José Luis (2011). Comandante Ramiro. Revelaciones de un guerrillero y líder revolucionario salvadoreño. Ocean Sur. www.oceansur.com
Schafik
Hándal (2014). Legado de un revolucionario (Tomos I, II y III) Ocean
Sur. http://oceansur.com/
Fotos
1.
Schafik Hándal,
comandante Simón (13·10·1930-24·01·2006)
2.
Simón visita a las FAL en cantón Montepeque, Guazapa Sur 1992
3. Cerro
Guazapa visto desde Aguilares: La Dama Durmiente
4.
Yesenia, Simón, Joseline,
Wilito, Narciso
Isa Conde y
Veronica
en
Guazapa Sur 1992
5. Schafik
Hándal, Hugo Chávez,
Fidel Castro y Evo Morales, La
Habana 2005
6. Schafik Hándal, mural en el barrio san miguelito
Abreviaciones
EDH:
El Diario de Hoy
FAL: Fuerzas Armadas de Liberación, brazo armado del PCS
LPG: La Prensa Gráfica
ONU: Organización de las Naciones Unidas
ONU: Organización de las Naciones Unidas
PCS: Partido Comunista de El Salvador
TSE:
Tribunal Supremo Electoral: https://www.tse.gob.sv
VBEX:
Vive
Bien
En
Xibalbá
Oz